domingo, 26 de junio de 2011

El pan nuestro de cada día


El otro día me preguntaron: “¿no te quedas sin temas de los que hablar?” Me quedé perplejo ante el interrogante y sólo se me ocurrió decir: “tú no lees las noticias a diario, ¿vedad?” Porque dime quién necesita imaginación o incluso tener tema de conversación propia echándole un vistazo a los periódicos.

Sin ir más lejos, hoy me voy a ceñir en dos noticias: la primera es la sanción que una profesora de Madrid ha sufrido por esgrimir en una camiseta una frase tan insultante, infame, ruin y degradante como ésta: “educación pública de todos y para todos”. ¡Habrase visto tal desfachatez! ¿Pero esta mujer quién se cree que es? La educación es sólo para los que se la pueden permitir y para que el ministerio correspondiente haga colegios, que sirvan más tarde para la visita del Papa. El resto está de más. En las camisetas los profesores tienen que llevar otro tipo de lemas, como “¿dónde coño está mi manzana?”, “Jaimito a la pizarra”, “yo tampoco me acuerdo de cómo se hacen las raíces cuadradas” o “¿para qué quieres tanto idioma si España es la mejor?” Con estos eslóganes en las camisetas seguro que esta osada y temeraria profesora, sin ninguna sensibilidad, se hubiera ahorrado el marrón. Lo que no acabo de entender es que si la educación aún es pública en España (veremos a ver a partir del año que viene) y lo público es para el pueblo, ¿por qué sancionan a esta mujer?

La segunda noticia es la mejor. Es una de estas cosas que cuando las lees, necesitas unos segundos de reflexión antes de empezar a descojonarte. La realidad vuelve a darle una vuelta de tuerca a la ficción y hay un nuevo negocio en la ciudad, tipo peli “Lies and alabis”, que proporciona al cliente aventuras extramatrimoniales. Además, por si hay alguien que no se haya enterado, lo anunciarán en La Sexta mostrando a una pareja muy acaramelada (o caliente, según se mire) diciendo: “estas dos personas están casadas pero no el uno con el otro”, para luego añadir: “la vida es demasiado corta, ten una aventura”. Ahora empieza el debate. Algunos dirán que joder, una cosa es que un día tengas un desliz y conviertas a tu pareja en un Mihura y otra muy distinta es que vendas cuernos. Otros argumentarán que el final del día, el que es infiel lo es porque le apetece, haya anuncios de televisión o no. Porque cuernos, haberlos hailos. Igual que prostitutas, por mucho que las quiten de los anuncios por palabras.
Pero no seamos hipócritas, que haya una agencia ponedora de cuernos, acojona bastante. Y acojona aún más el que la gente lo haga sólo porque la vida es corta. ¿Qué es lo siguiente? “Métase un chute, que la vida es corta y si no lo es, nosotros se la acortamos”. “Tírese a la madre de su mejor amigo, nosotros se lo preparamos todo. Venga hombre, que la vida es corta”. “Viva la experiencia de atracar un banco, que le alargará la vida ya que quien roba a un ladrón tiene 100 años de perdón”.

No sé, yo creo que se nos está yendo un poco la pinza con esto del todo vale, todo es relativo y a vivir que son dos días. Además, el capitalismo, con la excusa de la modernidad y el avance, nos está haciendo imbéciles y nos lo dan todo hecho. Coño si pasas de tu pareja o si quieres echar una cana al aire, joder, al menos cúrratelo, no seas vago.

Se me viene a la mente aquel tipo que le dice a su amigo: “qué graciosa es tu mujer, ayer me contó un chiste y casi me caigo de la cama”. También se me viene a la cabeza el puntazo que sería si contratas a esta agencia para quedar con una mujer con la que ponerle los cuernos a la tuya y te encuentras que tu cita es tu suegra.  

Por eso digo que, ¿quién necesita inventiva cuando tiene a mano la prensa de cada día?

1 comentario:

  1. Jajaja, muy bueno, si señor. Y lo de la educaión publica, mejor no hablar, madre mia que cuesta arriba se nos hace cada curso escolar, no se donde vamos a llegar, esperemos que como bien dices, por lo menos nos quedemos como estamos y el año que viene siga siendo publica y podamos seguir subiendo esa cuesta anual de la educacion,Un saludo.

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